Descripción:
La Turbidez (Tb) es una medida del grado en el que el agua u otro líquido incoloro, deja de ser transparente, debido a la presencia de partículas en suspensión.
La Turbidez tiene una gran importancia sanitaria, ya que refleja una aproximación del contenido de materias coloidales, minerales u orgánicas, por lo que puede ser indicio de contaminación. Cuanto mayor sea la cantidad de sólidos suspendidos en el agua, mayor será el grado de Turbidez.
En potabilización del agua y tratamiento de aguas residuales, la Turbidez es considerada como un buen parámetro para determinar la calidad del agua; a mayor Turbidez, menor calidad.
Las partículas suspendidas absorben calor de la luz del sol, haciendo que las aguas turbias se vuelvan más calientes, reduciendo así la concentración de oxígeno en el agua (el oxígeno se disuelve mejor en el agua más fría). Además, algunos organismos no pueden sobrevivir en agua más caliente, mientras que se favorece la multiplicación de otros. Las partículas en suspensión dispersan la luz, de esta forma decreciendo la actividad fotosintética en plantas y algas, que contribuye a bajar la concentración de oxígeno más aún.
Medición:
- Las mediciones más exactas de Tb se hacen con un medidor de turbidez nefelométrica. Se muestran los resultados en NTU (Nephelometric Turbidity Units), y tienen la mayor capacidad para determinar niveles bajos de Tb.
- Según la OMS (Organización Mundial para la Salud), la Turbidez del agua para consumo humano no debe superar en ningún caso las 2 NTU, y estar idealmente por debajo de 1 NTU.
- Los sistemas filtrantes, de las plantas de tratamiento del agua para consumo humano deben asegurar que la Turbidez no supere 1 NTU (0.6NTU para filtración convencional o directa) en por lo menos el 95% de las muestras diarias de cualquier mes.